El queso de bola, uno de los productos más consumidos e identificables en los hogares y negocios del sur de Quintana Roo, especialmente en Chetumal, enfrenta un notorio desabasto que ha comenzado a golpear tanto al bolsillo del consumidor como a la operatividad de pequeños y medianos comerciantes.
En los últimos días, el precio por unidad se ha elevado de manera significativa, pasando de los habituales 350 pesos a un máximo de 600 pesos. Las tiendas han comenzado a limitar su venta a una o dos piezas por persona, buscando frenar prácticas de acaparamiento y reventa que agravan la situación.
Daniel Torres Mora, director de la Cámara de Comercio en la Zona Libre de Belice, reconoce que no hay información oficial sobre las causas del desabasto. Sin embargo, señala como posibles factores un desequilibrio en la compra a volumen, problemas logísticos en el transporte y retrasos en los procesos de importación tanto en Belice como en el puerto de Progreso, Yucatán.
Ante este panorama, Torres Mora ha manifestado su intención de reunirse con el principal proveedor de queso de bola para conocer con precisión el origen del problema y establecer una proyección clara del tiempo que podría durar esta crisis de suministro.
Mientras tanto, en Chetumal, restauranteros ya evalúan subir precios en platillos derivados del queso de bola y algunos vendedores ambulantes han suspendido temporalmente su actividad ante la imposibilidad de costear el producto. La incertidumbre crece, y con ella, la urgencia de una solución concreta.
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